Guía de cuidado y reparación de muebles

1. Mantenimiento diario
  • Limpieza suave: Utilice un paño seco o ligeramente húmedo para eliminar el polvo. Evite los detergentes abrasivos.
  • Proteger de arañazos: Colocar posavasos o telas sobre superficies sensibles (mesas, aparadores).
  • Evite las fuentes de calor: mantenga los muebles alejados de radiadores, estufas o ventanas expuestas a la luz solar directa para evitar deformaciones o decoloraciones.
2. Materiales específicos
  • Beber :
    • Hidratar regularmente con un aceite o una leche de madera.
    • Trate los pequeños arañazos con un lápiz restaurador.
  • Telas y textiles:
    • Aspire periódicamente para evitar manchas.
    • Limpie las manchas inmediatamente con un producto adecuado (por ejemplo, detergente para telas).
  • Metal :
    • Eliminar las huellas dactilares con un producto antioxidante.
    • Aplicar una capa protectora de barniz para evitar la oxidación.
3. Reparaciones sencillas
  • Accesorios sueltos: apriete los tornillos o tuercas con una llave ajustable.
  • Tablas: Aplique presión lenta y constante con abrazaderas y madera contrachapada.
  • Agujeros o fugas: utilice pegamento para madera o espuma expansiva para rellenar los huecos.
4. Consejos adicionales
  • Ventile los muebles: abra los cajones y las puertas regularmente para evitar la acumulación de humedad.
  • No sobrecargar: Respetar la carga máxima de los estantes o armarios.
  • Evite impactos: manipule los muebles con cuidado para evitar daños.
5. Cuándo llamar a un profesional
  • Para problemas complejos (roturas importantes, restauración de muebles antiguos).
  • En caso de daños estructurales o vigas rotas.
¡No dudes en consultar guías en vídeo o talleres de mantenimiento para explicaciones prácticas!